Mariquita y cultivo ecológico: Este insecto resulta ser un gran aliado de los cultivos combatiendo con diferentes plagas como los pulgones

Hay detalles que pasan desapercibidos, pero son esenciales para los agricultores y sus cultivos. Hoy os vamos a hablar de uno de ellos; la importancia de un insecto tan pequeño como la mariquita en los cultivo. La mariquita y cultivo sostenible.

Un control biológico perfecto para que los cultivos no tengan ningún tipo de problema.

En la fase de crecimiento de dicho insecto, las mariquitas desarrollan una voracidad que ayudan a prevenir plagas de pulgón, ácaros y cochinillas, entre otras especies. Algo que resulta esencial para los diferentes cultivos, entre ellos las alcachofas.

Si hablamos de números, podemos referirnos a que las mariquitas devoran hasta 600 pulgones. La mariquita y cultivo sostenible son, sin duda, un aliado casi invisible para los agricultores.

En Mercagrisa siempre apostamos por piezas de calidad y muchas de ellas utilizan este sistema de control biológico; un sistema exitoso y respetuoso con el medio ambiente. Se trata de un depredador natural de los pulgones y por eso es tan importante que esté presente en los cultivos y huertos.

El ciclo vital de las mariquitas

Suele ser de un año, y es un periodo en el que les da tiempo de sobra a tener una amplia descendencia. De hecho, para facilitar el sustento de la descendencia, colocan esas ovadas justamente en una colonia de pulgones. De esta forma, aunque son larvas en ese momento ya colaboran en la tarea de eliminarlos del cultivo.

España mantiene su previsión de 220.000 toneladas pese a la DANA o gota fría

La gota fría sufrida la semana pasada en zonas de la comarca valenciana fue letal para algunos cultivos. Por suerte, las provincias de Murcia y Alicante no se vieron amenazadas pro lo que el volumen de producción nacional será similar al de otros años.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) coloca a la Región de Murcia como la mayor productora de alcachofa de España, con cerca de 89.821 toneladas el año pasado, en el 2021, seguida de la Comunidad Valenciana o Andalucía.

Un trabajo recompensado

Unos datos espectaculares resultado del trabajo incansable de los agricultores, que día tras día cuidan de las hortalizas para que solo se obtengan de primer nivel.

Según los datos que apunta Alcachofa España, el 30% de la exportación va a países de la Unión Europea como Alemania, Suiza o Francia. Mientras que el resto, un 70% de la producción, se destina al mercado nacional.

Ahora que vuelve a ser el tiempo de esta hortaliza, te comentamos varias cuestiones para que tus alcachofas tengan la mejor calidad posible
 

Como sabéis existen varios factores que influyen en la calidad de las alcachofas.

  • Terreno. La mejor tierra para el cultivo de alcachofas necesita que sea rica en materia orgánica y suelos profundos y permeables.
  • Sol. La alcachofa, como el resto de las hortalizas, necesitan luz solar, pero no de forma excesiva. Se recomienda alrededor de unas 5-6 horas al día, pero ya depende de dónde esté situada la plantación.
  • Agua. El mejor sistema son riegos frecuentes y no abundantes, no debiendo faltar humedad. Por lo cual, el sistema de riego por goteo puede ser una buena solución.
  • Temperatura. El mejor clima para el cultivo de las alcachofas es la temperatura suave y un ambiente húmedo. Si hay temperaturas muy elevadas o más altas de lo normal, las brácteas tienden a abrirse y a endurecerse y, por tanto, el período de recolección disminuye.
  • Nitrógeno. Cuando las temperaturas son elevadas, en época de cosecha, es necesario aportar nitrógeno en todos los riegos para intentar retrasar lo máximo posible el endurecimiento de las brácteas. Además, esta acción favorece el desarrollo foliar y así conseguir que el período de la recolección se mantenga más tiempo. Cuando nos adentramos en la época de producción tenemos que tener en cuenta varias cosas; no debe faltar ni el agua ni el nitrógeno.

Recuerda que normalmente la alcachofa entra en producción tras pasar 75-90 días después del trasplante. Aunque es una hortaliza de invierno no conviene que se produzcan fuertes heladas.

Durante el cultivo de la alcachofa no suelen realizarse ningún tipo de podas. Esto se hace cuando se finaliza el cultivo, es decir, cuando la planta empieza a secarse. Esto favorece el desarrollo de nuevos hijuelos que garantizan la producción del próximo año.

Los beneficios de la alcachofa: Muy utilizada en la dieta mediterránea

Debido a que tiene menos de un 1% de grasa y poca cantidad de hidratos por lo que su valor calórico es muy bajo. Es buena para el hígado, digestiva y reduce el colesterol, entre otros. Por estos motivos es una hortaliza tan solicitada.